MI CREDO Y ENUNCIADO DE MISIÓN PERSONAL

MI CREDO Y ENUNCIADO DE MISIÓN PERSONAL

En este Credo y Enunciado de Misión Personal proclamo los valores y principios en los cuales quiero inspirarme y con los que quiero comprometerme. Constituye un enunciado conciso de mis metas como persona y mi proyecto de vida.

Me propongo grabarlo en mi mente y en mi corazón, de modo que influya en todas mis acciones, y me impulse a alinear mi conducta con los valores en él expresados. Me acompañará para que cada día contribuya de un modo significativo a la visión que tengo de mi vida como un todo.

Lo he escrito para inspirarme y para guiar mi vida, no para impresionar a nadie.

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42. A MODO DE RESUMEN: IDEAS PARA LA CONSTRUCCIÓN DE UN CREDO Y ENUNCIADO DE MISIÓN PERSONAL.

A MODO DE RESUMEN: IDEAS PARA LA CONSTRUCCIÓN DE UN CREDO Y ENUNCIADO DE MISIÓN PERSONAL.

VISIÓN. SUEÑOS. PROYECTO DE VIDA. METAS.

§ Empezaré por aclarar y descubrir mis grandes deseos, las grandes contribuciones que quiero hacer, los logros extraordinarios que quiero alcanzar, las realizaciones supremas, mis más profundas aspiraciones, y después me comprometeré a luchar para alcanzarlas.

§ Los ideales son la más poderosa fuerza impulsora de la vida, nuestro impulso movilizador. Nos dan la fuerza para luchar contra los sentimientos que nos alejan del logro, la contribución y el cambio personal, y para abandonar todo aquello que interfiera con nuestros propósitos más elevados.

§ Me mantendré inspirado por algún proyecto extraordinario, una meta grandiosa, un gran propósito, y centraré mi tiempo y energía en alcanzarlo.

§ Cultiva una actitud reverente hacia mi proyecto de vida. Daré a la vida el profundo “!Sí¡” que me capacita para decir “¡No!” a lo trivial, lo irrelevante y a las cosas que no contribuyan a mis metas de mayor prioridad.

§ Mantendré una devoción y una fe inquebrantable en mi potencial y propósito, y un impulso apasionado por el crecimiento personal. Cultivaré un sentido de respeto y reverencia por mi proyecto de vida, y asumiré mi desarrollo personal como algo sagrado.

§ No estoy dispuesto a permitir que nada ni nadie me desanime en la búsqueda apasionada de mis metas. Me aferraré con pasión a ellas

§ Seré fiel al compromiso que he asumido conmigo mismo, y haré lo necesario para avanzar en la dirección que me he trazado. He decidido cuáles son las prioridades más altas, y tendré el valor de decir “!No¡” a otras cosas.

§ Me fijaré siempre metas cada vez más altas, más desafiantes; esforzarme en alcanzarlas demandará coraje y heroísmo.

§ Puedo hacer de mi mismo un ser más sabio, más sensible, abierto, noble y creativo; Puedo llegar a ser un ser humano brillante, magnífico, talentoso y fabuloso. No para guardar estas virtudes dentro de mi, sino para darlas a los demás.

§ Tengo capacidad de ejecutar cosas extraordinarias. Muy dentro de mí yacen poderes y fuerzas que pueden revolucionar mi vida si me propongo despertarlas y traducirlas en acciones.

§ Me niego a seguir la rutina de mi vida; redefiniré mis prioridades, y alcanzar mis grandes metas se convertirá en un propósito central de mi vida.

§ Me propongo dejar un legado, ser una luz, un guía. Sé que el ejemplo que doy a los que me rodean influye constantemente en su actitud y en el valor con el que encaran la vida.

§ Con fuerza y la valentía asumiré cada nuevo día la tarea de avanzar hacia la realización de mi nuevo proyecto de vida.

§ Las metas contenidas en mi Credo y Enunciado se Misión son metas liberadoras por la que vale la pena luchar.

§ He asumido el compromiso por ayudar a los demás a mejorar su calidad de vida, cultivar mi integridad personal y mi equilibrio ante cualquier circunstancia. Trabajaré firmemente para mejorarme a mi mismo como ser humano. Buscaré mi propia grandeza y perfección

§ Seré una persona con un proyecto de vida orientado hacia el crecimiento, la excelencia y la contribución; altamente disciplinada; concentrado intensamente en las actividades de importancia suprema y en los objetivos de mayor prioridad.

CRECIMIENTO, PERFECCIONAMIENTO.

§ Dirigiré toda mi atención al crecimiento espiritual.

§ He hecho el firme propósito de avanzar un poco más cada día, con grandes dosis de ilusión, constancia y sacrificio.

§ Para perfeccionarme, ejercitaré cada día un poco más de paciencia, de comprensión y de valentía

§ No cejaré en la búsqueda de los mejor que hay en mí.

§ Buscaré el perfeccionamiento continuo, el crecimiento y el aprendizaje.

§ El crecimiento personal es una aventura maravillosa que me llevará en pos de mi propia grandeza y perfección como ser humano.

§ He tomado la decisión de cambiar de hábitos, desarrollar virtudes, aprender disciplinas básicas, cumplir lo prometido, ser fiel a mis promesas, actuar con valentía y ser auténticamente respetuoso con los sentimientos y convicciones ajenos.

VALORES Y PRINCIPIOS.

§ Me esforzaré en ser una luz, no un juez; ser un modelo, no un crítico.

§ Procuraré siempre ajustar mi vida a los valores que he definido como de importancia suprema. Viviré fiel a los principios esenciales y actuaré con integridad en el momento de elegir.

§ Los valores y principios serán la guía de mis elecciones y acciones diarias. Me esforzaré en centrar mi vida en los valores esenciales. Cultivaré siempre la firme determinación de hacer lo correcto

§ Escojo el camino de la vida, del amor, la inquietud por los demás, la esperanza, la fe en el mañana, la confianza, la bondad y la dignidad humana. Elijo ser más paciente, sensato, cariñoso, diligente y colaborador.

§ Fundamentaré mis relaciones con los demás sobre la base de el respeto, la bondad, la sensibilidad, la preocupación auténtica y la consideración.

§ Tendré siempre presente que lo que hago cuando nadie me está mirando revela claramente lo que en realidad soy.

§ No me dejaré arrastrar por mis estados de ánimo. Subordinaré las emociones o sentimientos del momento a los valores y metas de mayor prioridad. No permitiré pensamientos que me paralicen o que me aparten de mi misión.

ESPERANZA Y FE. HUMILDAD. PACIENCIA.

§ Creo firmemente que puedo mejorar mi vida y alcanzar las metas que me proponga.

§ Sean cuales sean las circunstancias, siempre mantendré la esperanza.

§ Estoy convencido que todos los temores, las dudas y la incertidumbre desaparecen cuando la fe está presente.

§ Cultivaré una fe profunda, que me impulse con ilusión hacia metas cada vez más altas.

§ Creo firmemente en la posibilidad de alcanzar mi propia grandeza.

§ Recibiré los elogios sin envanecerme.

§ Me esforzaré en dominar mi ego.

§ Seré paciente con los demás y conmigo mismo.

AUTENTICIDAD. INTEGRIDAD. HONESTIDAD. CUMPLIR LAS PROMESAS

§ No trataré de aparentar ser o saber más de lo que en realidad soy o sé.

§ No permitiré ser seducido por el orgullo y las apariencias.

§ Eliminaré la necesidad de vivir para impresionar

§ Seré congruente. Haré coincidir lo que pregono con lo que hago.

§ Pondré en práctica lo que recomiende y predique.

§ No pediré fuerza prestada a los símbolos de status.

§ Me esforzaré por armonizar honestamente mis palabras con mis actos

§ Dejaré de decir mentiras inocentes y de dar una imagen falsa de mi mismo.

§ Entre la verdad y la armonía, elegiré la verdad.

§ Me esforzaré en hacer el bien a los demás, sin la menor malicia ni deseo de engañarlos, de aprovecharme de ellos, de manipularlos ni de controlarlos.

§ Seré honesto, honrado y totalmente íntegro.

§ No haré concesiones respecto al comportamiento irresponsable de otra persona, excusándolo o simpatizando con él.

§ Los esfuerzos y sacrificios permanentes harán de mí un ser de gran integridad y coraje.

§ Cultivaré mi integridad personal, manteniendo los compromisos conmigo mismo

§ Cumpliré mis promesas, y mantendré mi palabra de forma consecuente.

§ Haré solamente promesas que esté decidido a cumplir o que pueda mantener.

FELICIDAD. JUBILO. AFABILIDAD. HUMOR. RISA

§ Mantendré siempre la predisposición a hallar lo bueno en todas partes

§ Disfrutaré de la vida.

§ Tengo el derecho a ser feliz, y el deber de contribuir a hacer felices a los demás.

§ En medio de la tensión, optaré por la calma y el buen humor.

§ Haré esfuerzos por mantener un corazón alegre y un espíritu afable.

§ Opto por la felicidad; me propongo ser feliz y sonreír auténticamente.

BENEVOLENCIA. CONTROLAR EL ENFADO. APLACAR LA IRA. NO VIOLENCIA. PAZ INTERIOR

§ Apartaré de mi mente los pensamientos de venganza, ira u odio

§ Mantendré la calma, cuando mi prójimo se muestra áspero.

§ Me esforzaré en evitar el enojo o la ira, y de armarme de valor para decir lo que siento, sin insultar ni gritar.

§ Guardaré silencio, cuando mis palabras puedan hacer daño.

§ Seré veraz, abierto y amable con las demás personas.

§ Mantendré abiertas las vías de la comunicación, por más enfadado que me pueda sentir.

§ Me abstendré de insultar o gritar, por más enfadado que me sienta.

§ Me esforzaré en no irritarme ni enfadarme por motivos tontos.

§ No me iré nunca a la cama sintiendo ira.

§ Me niego a trivializar o a considerar una diversión la violencia, la agresividad, la falta de humanidad y la muerte.

§ Elijo estar en paz y no ser violento.

§ Cuando oiga a alguien decir cosas con las que esté en violento desacuerdo, suprimiré la violencia de mi reacción interna.

§ Cuanta más paz halle en mi interior, menos me afectará la enemistad y el desprecio de los demás.

§ Haré un esfuerzo conciente por cultivar la paz en mi interior.

AUTOCONOCIMIENTO. MEDITACIÓN. ESPIRITUALIDAD. RENOVACION. CONTEMPLACION

§ Buscaré un momento cada día para meditar y reflexionar profundamente sobre los valores superiores y los principios correctos.

§ Cultivaré la reflexión sobre mi vida, pues creo firmemente que ser conciente es el principio del cambio.

§ Dedicaré un tiempo a estar a solas y en silencio.

§ Rechazaré los pensamientos que degraden o vulgaricen mi proyecto de vida.

§ Cultivaré la humildad para buscar retroalimentación, la sabiduría para comprenderla, y la integridad para actuar acorde con ella

§ "Dios, pido tu ayuda para hacer que mis anhelos se materialicen"

§ Cultivaré una rica vida interior.

§ Me renovaré espiritualmente con regularidad.

§ Dirigiré toda mi atención al crecimiento espiritual.

§ Meditaré, para enriquecer el significado y el propósito de mi vida, y para cultivar la inspiración y la plenitud.

§ Buscaré la sabiduría, la paz y la felicidad.

§ Abandonaré la dispersión, la angustia y la tristeza.

§ No permitiré que mi mundo interior sea invadido por lo insustancial, por los símbolos de la muerte espiritual y por lo perverso.

§ Tendré momentos de meditación y renovación, para construir la fuerza que me permita afrontar con éxito los desafíos difíciles de la vida.

§ En los momentos de renovación trataré de llegar al fondo de mi alma, procurando aclarar serenamente mis pensamientos y la firmeza de mi determinación.

§ No perderé nunca la oportunidad de contemplar algo hermoso.

§ Observaré con admiración la belleza que hay en la naturaleza y en el universo.

SABIDURÍA. APRENDIZAJE. DESARROLLO INTELECTUAL.

§ Buscaré y cultivaré la verdad y la sabiduría.

§ Escucharé a los demás, seré receptivo a sus enseñanzas, y aprenderé continuamente de su experiencia.

§ Creo firmemente que aprender es una gran aventura, un proceso que me impulsa a ser mejor.

§ Estimularé el desarrollo y el perfeccionamiento de mi mente y cultivaré el hábito de leer y estudiar.

§ Cultivaré hábitos de continuo aprendizaje.

§ Perseguiré mis sueños con pasión, viviré mi vida al máximo.

ENTUSIASMO. POSITIVISMO. OPTIMISMO. VITALIDAD. PASIÓN. AMAR Y DISFRUTAR LA VIDA.

§ Disfrutaré todo el tiempo de la maravilla de estar vivo.

§ He tomado la decisión de vivir significativamente todos los días. Viviré mi propia vida del modo más gratificador para mi y para las personas que amo.

§ Tengo la certeza de que la vida, pese a todas sus penas, es maravillosa

§ Transmitiré energía positiva, irradiaré alegría y conservaré el sentido del humor.

§ Haré con amor cada una de las tareas cotidianas.

§ Mantendré una actitud positiva, alegre y de emoción por la vida.

§ Cultivaré un espíritu entusiasta, optimista y animoso.

§ Demostraré entusiasmo y ganas de vivir en todo lo que haga.

§ Seré entusiasta en cualquier cosa que decida emprender.

§ No permitiré que mi alma dormite

§ Confrontaré cualquier inclinación a no ser participativo en la vida o a permanecer al margen

§ Dejaré de renegar, de lamentarme y de ser pasivo

§ Me convertiré en una persona activa en lugar de pasarme la vida criticando, lamentándome o dando explicaciones.

§ Renovaré cada día el compromiso de vivir plenamente.

§ Viviré con devoción y entusiasmo.

§ Pondré energía en mi vida interesándome en nuevos proyectos o aficiones.

§ Cuando anhele realmente con pasión, nada me podrá detener.

§ Cambiaré la comodidad y la rutina por una renovada pasión por mi proyecto de vida.

§ No me perturbaré ante cosas o situaciones que de ningún modo puedo cambiar o evitar

§ Me esforzaré por estar a gusto cualquiera sea el sitio en donde me encuentre

§ Suprimiré la tendencia de corregir a los demás.

§ Me mantendré activo, interesado, ilusionado y entusiasmado con lo que hago.

§ Sé que cuando anhelo realmente con pasión, nada me puede detener.

DETERMINACIÓN. TENACIDAD. DISCIPLINA. AUTODOMINIO. VICTORIA SOBRE SI MISMO. FUERZA INTERIOR.

§ Alcanzaré lo que anhelo, si estoy dispuesto a luchar por hacer realidad mis grandes aspiraciones.

§ Enfrentaré el mundo con determinación, valentía, compromiso, temple y fortaleza.

§ Con tesón, inteligencia, deseo y arrojo, llegaré a cimas cada vez más altas

§ Asumiré con tenacidad el proceso de crecimiento personal.

§ Concentraré todas mis habilidades y todos mis esfuerzos en la tarea que tengo entre manos, y me aplicaré a ella con dedicación.

§ Actuaré con fuerza y valentía para conseguir mis objetivos y alcanzar mis metas.

§ Me esforzaré en ser una persona altamente disciplinada.

§ El éxito personal se desprende de mi capacidad de autodominio, de la victoria sobre mí mismo.

§ Controlaré mis pasiones básicas, para ser capaz de lograr el éxito en lo que respecta a resoluciones de nivel superior.

§ Diré "¡NO!" a las cosas que no contribuyan a mis prioridades más altas.

§ No permitiré pensamientos que me paralicen o que me aparten de mi misión.

§ Abandonaré todo aquello que interfiera con mis propósitos más elevados.

§ Enfrentaré mis temores al cambio y al fracaso.

§ Confrontaré la tentación de capitular, ceder o renunciar.

§ Cuando esté siendo provocado o me sienta fatigado, practicaré el autodominio.

DEDICACIÓN. PERSEVERANCIA.

§ Me aplicaré con excelencia y perseverancia a mis metas de mayor prioridad. .

§ Persistiré, y con toda certeza a empezaré a sentir la alegría del crecimiento real, y a recoger los frutos de una vida congruente y eficaz.

§ Perseveraré y mantendré los compromisos que he asumido conmigo mismo.

§ Trabajaré con dedicación y perseverancia en mis proyectos.

§ Sé que para alcanzar las metas importantes no existen atajos ni vías fáciles.

§ Seré paciente, perseverante y metódico.

§ Sé que ningún cambio sobreviene sin trabajar firmemente.

§ Creo firmemente que con un talento normal y una gran perseverancia, puedo realizar cosas extraordinarias.

§ Para recoger frutos debo trabajar de forma paciente, ardua y diligente.

§ No obtendré resultados de un día para otro; pero aunque no vea cambios inmediatos, al final cosecharé los frutos del esfuerzo realizado.

§ Abandonaré cualquier actitud capituladora y la sustituiré por otra de tenaz perseverancia.

§ Perseveraré y seguiré adelante, sin desmayo ni fatiga, sin que cruce siquiera por mi mente la idea de abandonar.

CONFRONTAR EL MIEDO, LOS TEMORES, LA AUTOCOMPASIÓN. ACTITUD ANTE LOS ERRORES. FLEXIBILIDAD. NO CAPITULAR. ASUMIR RIESGOS.

§ No aprenderé hombría sólo en los libros.

§ No permitiré que la autocompasión se adueñe de mí.

§ Nunca sentiré lástima por mí mismo.

§ Tendré presente que la tristeza y la autocompasión no borrarán ni la más mínima parte de mi pasado.

§ Admitiré inmediatamente mis errores, y haré lo necesario para repararlos, aprender de ellos y seguir adelante.

§ No temeré a los errores; la posibilidad de cometer un error no me paralizará.

§ Nunca es tarde para enmendar un error, para empezar un proyecto o para revivir una ilusión.

§ Evaluaré con serenidad mis errores y haré todo lo posible por no caer de nuevo en las mismas equivocaciones.

§ No me condenaré a mi mismo cuando cometa un error.

§ No justificaré mi propio error con el error de otro.

§ Me esforzaré en extraer lecciones de cada caída y cada error.

§ Cuando cometa un error, no buscaré excusas ni culparé a los demás.

§ Admitiré mis errores y pediré perdón, sin explicaciones ni defensas.

§ Aprenderé de mis errores y los convertiré en una oportunidad de crecimiento.

§ Me adaptaré con flexibilidad a las circunstancias cambiantes.

§ Eliminaré la rigidez al máximo posible, y le daré espacio a la espontaneidad.

§ Resistiré a la capitulación, al deseo de entregarme, a la parálisis emocional que se deriva del miedo, de la cólera o de la frustración.

§ No podré conocer la fortaleza a menos que esté dispuesto a probarme a mi mismo.

§ Estoy dispuesto a asumir los riesgos que supone el cambio.

§ Tendré el valor de asumir riesgos.

§ Tendré siempre presente que es mejor arriesgarme que permanecer al margen por temor a que algo resulte mal.

§ Nunca sabré qué se siente al desembarazarme de un temor hasta que acepte el riesgo de enfrentarme a él.

§ Tengo que salir a la palestra, sufrir fracasos, experimentar y vivir experiencias, con lo cual crecerá mi sabiduría y aumentarán mis posibilidades de éxito.

§ Tengo el reto de arriesgarme, la obligación de prepararme y el derecho a equivocarme.

FORTALEZA. GRANDEZA. CORAJE. VALOR. VALENTIA. ENFRENTAR LAS ADVERSIDADES.

§ No me dejaré desanimar, y no permitiré que las dificultades me amilanen.

§ Seré fuerte en los momentos difíciles y en las épocas de adversidad.

§ Desarrollaré el valor para ser capaz de sobreponerme al peligro, el infortunio y el temor.

§ Optaré por enfrentar con valor cada desafío.

§ Afrontaré la calamidad con grandeza

§ Responderé con valor cuando me golpee el infortunio.

§ Haré mi mayor esfuerzo por crecerme ante las dificultades.

§ Tengo la capacidad y la responsabilidad de aprender y crecer con cada obstáculo que la vida pone en mi camino.

§ Los obstáculos me retan a buscar con más empeño y a descubrir nuevas maneras de hacer las cosas

§ No me daré por vencido ni perderé el valor.

§ A pesar de lo adversas que sean las circunstancias, controlaré mi actitud y mis pensamientos.

§ Creo firmemente que es en las circunstancias adversas donde se moldea mi carácter, la fortaleza interior y el temple emocional.

§ En medio de la adversidad, me propondré ser fuente de inspiración y ánimo para los demás.

§ No le daré la espalda a los problemas.

§ En los momentos decisivos en los que la vida me ponga a prueba, daré lo mejor de mí para ser capaz de afrontar el cambio, la pérdida y el dolor sin eludirlos ni derrumbarme.

§ El crecimiento de mi alma se produce fundamentalmente en medio de la adversidad.

§ Cada caída como una nueva oportunidad de aprender.

§ Cada vez que aprendo algo nuevo de una caída, aumenta mi capacidad de escalar rutas diferentes y más tortuosas el día siguiente.

§ Aprenderé lo que la vida puede enseñarme durante las épocas de infortunio

§ Cuando la vida me propine un golpe que me derriba, me levantaré rápidamente y mantendré fija la mirada en mis metas futuras.

§ He tomado la decisión de mirar sólo hacia delante y hacia la cumbre.

§ En lugar de amilanarme ante las situaciones difíciles, las encararé con fortaleza interior.

§ No me dejaré dominar por una actitud de renuncia o abandono cuando las cosas no marchan como a mi me gustaría.

§ No buscaré ni acudiré a las salidas fáciles.

§ Me propongo avanzar gradualmente, por medio del ejercicio cotidiano del temple emocional.

FORTALEZA FÍSICA. BELLEZA INTERIOR Y EXTERIOR

§ Me esforzaré por estar físicamente en forma, para tener la fuerza, la resistencia y el vigor necesarios para emprender las tareas que me proponga.

§ Fortalecerme físicamente es otra forma de desarrollar mi fuerza interior y mi carácter.

§ Mi disposición interna será la de no centrarme en la enfermedad ni quejarme continuamente o porque sí.

§ Me comprometo a hacer ejercicio de manera metódica y disciplinada, para dar ejemplo de resistencia y vitalidad.

§ Haré ejercicio regularmente, para llegar a alcanzar una condición física excelente.

§ No cederé a la tentación de la vanidad.

§ No me juzgaré a mí mismo ni juzgaré a los demás por las apariencias.

§ Sólo con el corazón puedo ver correctamente, pues lo esencial es invisible a los ojos

§ Apreciaré la belleza interior; no rendiré reverencia a la belleza física.

§ Me resistiré a la tentación de concentrarme en los rasgos externos.

§ No me dejaré seducir por los fetiches de la belleza externa.

PODER PERSONAL. DECISIÓN Y VOLUNTAD DE CAMBIAR. VIEJOS HÁBITOS Y NUEVOS HABITOS.

§ Me he propuesto cambiar, transformar mi rutina y acabar con viejos hábitos

§ Cultivaré la energía vital que me haga capaz de tomar las decisiones que sean necesarias para mejorarme como persona.

§ Puedo cambiar; de mi depende superar pautas antiguas y desarrollar nuevos hábitos de eficacia, de felicidad y de relaciones basadas en la confianza.

§ He asumido seriamente la decisión de hacer las cosas mejor y de ser mejor.

§ Estoy decidido a subordinar y sacrificar lo que quiero ahora por lo que anhelo alcanzar más adelante.

§ Lucharé con todo vigor contra las fuerzas negativas que obran contra el crecimiento y el cambio personal.

§ Desarrollaré la fuerza de voluntad que me haga capaz de hacer algo aún cuando no quiera hacerlo.

§ Me he comprometido a liberarme de viejos hábitos y a emprender el proceso del cambio personal

§ Desarrollaré nuevos hábitos congruentes con lo que aspiro alcanzar en mi vida

§ Estaré atento a aprender de mis vivencias y experiencias recientes, para evitar seguir cometiendo los mismos errores y cayendo en los mismos viejos hábitos

§ Rechazaré optar por la rutina.

ACCION VS PASIVIDAD. CAPACIDAD DE ELEGIR. TOMAR LA INICIATIVA. CADA PEQUEÑA DECISION CUENTA. ASUMIR LA RESPONSABILIDAD DE NUESTRAS VIDAS.

§ Optaré por la acción, evitaré la queja y la pasividad.

§ Me sacudiré de encima la pasividad.

§ No me abandonaré a la pasividad y la indiferencia.

§ Las palabras no bastan. Debo desarrollar la fuerza y la valentía para llevar a cabo las cosas.

§ Comenzaré a actuar, porque las intenciones no bastan si no van acompañadas de acciones.

§ No me pasaré el tiempo pensando que tengo que acabar un proyecto o en lo desbordante que pueda parecer una tarea. Empezaré a hacerlo ahora.

§ Tengo opciones. Puedo elegir la alegría, en vez de la tristeza. Puedo optar por la acción y no por la apatía, por el desarrollo, y no por el estancamiento.

§ Depende de mi elegir cómo deseo vivir mi vida.

§ Antes de reaccionar, prepararé mi mente y mi corazón, para optar por actuar con lo mejor de mi mismo.

§ Tendré la valentía de detenerme, controlarme y buscar la mejor respuesta a una situación.

§ Elijo ser una parte de la solución, no una parte del problema.

§ Cuando mis elecciones vaya contra lo corriente o contra las expectativas de los demás, seré cordial pero terminante.

§ Me esforzaré por mejorar las situaciones en que me encuentre.

§ Buscaré soluciones a los problemas, antes que convertirme yo mismo en un problema

§ Realizaré la tarea que me corresponda o que deba hacer

§ Nadie distinto a mi va a hacer lo que me corresponde hacer, o a aportar lo que me corresponde aportar.

§ Cuando pueda hacer algo, lo haré. No esperaré a que sean los demás los que tomen la iniciativa o asuman esa responsabilidad.

§ Actuaré para no dejar pasar las oportunidades.

§ Tendré iniciativa para hacer que las cosas ocurran, para que las circunstancias se creen o cambien.

§ Una vida sobresaliente será el fruto de una serie de pequeñas decisiones que he de tomar todos los días.

§ Las pequeñas elecciones que hago en mi vida diaria me llevan irresistiblemente a mi destino.

§ Cualquier cosa que haga, por insignificante que parezca, expresará mi carácter o mi falta de carácter, mi autenticidad o mi falta de autenticidad.

§ Todas mis decisiones son importantes. Todas ellas van sumando hasta convertirse en hábitos del corazón que me impulsan hacia un determinado destino.

§ Cada una de las pequeñas elecciones que haga en mi vida diaria me impulsan hacia la grandeza o hacia la mediocridad.

§ En cada momento se está decidiendo si, en el día de mi suprema tristeza o tentación, fracasaré miserablemente o venceré con gloria.

§ Una vida sobresaliente es el fruto de toda una serie de pequeñas decisiones que tomo todos los días.

§ No culparé de mi desdicha o de mi enfado a las otras personas o a las circunstancias externas.

§ Creo firmemente que mi vida es el resultado de mis decisiones más que de las circunstancias externas.

§ Asumiré la responsabilidad por mis sentimientos, estados de ánimo y acciones.

§ No me dejaré apabullar por nada externo a mí.

§ Asumiré la responsabilidad de cambiar mi vida, sean cuales sean los riesgos que hacerlo conlleve, y traduciré mi resolución en acciones.

§ Si lo que elijo no sale como yo deseo, no culparé a nadie. Sólo yo puedo responsabilizarme por no ser.

§ No otorgaré a las circunstancias externas, el ambiente o a las otras personas, el poder de controlarme.

§ Actuaré con presteza cuando me llame el deber.

§ No aduciré mis propias debilidades como justificación de lo que hago o dejo de hacer.

§ Soy responsable por las decisiones que tomo y por los resultados que obtengo.

§ No culparé a los demás, a la mala suerte o a las circunstancias externas de mi situación.

§ Cuando algo salga mal o no resulte como esperaba, reconoceré mi parte de responsabilidad.

§ Si lo que estoy haciendo no funciona o no da los resultados esperados, lo reconoceré sin demora.

§ Seré ordenado en mi persona y en mi trabajo.

NO POSPONER NI IMPROVISAR. FIJAR PRIORIDADES.

§ Abandonaré la tendencia a posponer.

§ Me esforzaré en pensar preventivamente, para evitar que los problemas se conviertan en crisis.

§ Trataré de prevenir los problemas, pensando con anticipación, y tomando las medidas que impidan que las situaciones lleguen a convertirse en crisis

§ Abandonaré la tendencia a posponer, a dejar para después las tareas relacionadas con el cumplimiento de mis responsabilidades.

§ Evitaré la improvisación. No dejaré las cosas importantes para última hora.

§ Me esforzaré en abandonar la tendencia a posponer.

§ Dedicaré mi tiempo a las cosas que considero importantes para mi realización o para ayudar a los demás.

§ Estableceré prioridades y me organizaré y ejecutaré en función de ellas.

§ Me concentraré intensamente en las actividades de importancia suprema

TRIUNFO Y REALIZACIÓN PERSONAL.

§ No estoy dispuesto a aceptar ser mediocre o a conformarme con lo menos.

§ Me esforzaré siempre por hacer las cosas mejor.

§ Los grandes triunfos los conseguiré poco a poco, día a día, con grandes dosis de ilusión, constancia y sacrificio.

§ Viviré aferrado a un ideal, lo realizaré con paciencia, sin desfallecer y creciéndome ante las dificultades.

§ No me conformaré jamás con la mediocridad.

§ Recordaré siempre que mi propia resolución de triunfar es más importante que cualquier otra cosa

§ Me concentraré no en ganarle a los demás, sino en batir mi propio récord, superar mi propia marca.

§ Me propongo acometer acciones de superación personal, no de vez en cuando sino hora tras hora, día tras día.

§ Cada pequeña victoria privada representa un logro, una conquista, y expresa mi voluntad de vencer más desafíos.

APRENDER DE LA VIDA. CARÁCTER. MADUREZ. VICTORIAS PRIVADAS

§ Estaré atento a aprender de mis experiencias y observaré con atención la experiencia de los demás.

§ Aprenderé de mi pasado, actuaré con confianza en el presente, y tendré esperanza en el futuro.

§ Solo es posible formar mi carácter por medio de un proceso continuo y constante.

§ Construir un carácter de integridad total comienza con el anhelo de centrar mi vida en principios correctos y de romper con los hábitos inconvenientes.

§ Pensaré con cuidado antes de reaccionar.

§ No hablaré irreflexivamente.

§ No sobre reaccionaré ante las conductas negativas, las críticas, las debilidades o los errores de los demás.

§ No es posible obtener victorias públicas perdurables a menos que antes haya alcanzado una victoria privada rotunda.

§ "Las victorias privadas preceden a las victorias públicas".

§ Si logro una pequeña victoria privada cada día, y persisto en la búsqueda de lo mejor de mí mismo, los resultados aparecerán con total seguridad.

§ Reaccionaré con delicadeza cuando deba afrontar los puntos vulnerables, los desplantes y los sentimientos que pueden expresar los demás.

ACTITUDES PARA ACTUAR DESDE UNA POSTURA DE FORTALEZA. INDEPENDENCIA E INDIVIDUALIDAD. OPINIONES, JUICIOS Y EXPECTATIVAS DE LOS DEMÁS.

§ No permitiré que nadie pretenda manipularme o arrebatarme el derecho a ser yo mismo.

§ Seré considerado pero terminante cuando están en juego mis derechos o creencias.

§ Tendré coraje para expresar mis derechos, sentimientos y convicciones.

§ No me dejaré intimidar ni permitiré que me maltraten, de palabra o de obra.

§ No he de capitular, ni ceder o renunciar, cuando se trata de defender principios correctos.

§ Me comportaré con respeto pero sin temor ante las figuras de autoridad.

§ No concederé a nadie más valor del que me atribuyo a mí mismo

§ Defenderé mis derechos y haré reivindicaciones legítimas, con una actitud de plena confianza en mí mismo, con resolución, decidido a desterrar cualquier actitud débil o pusilánime.

§ Si alguna ocasión extrema lo exige, debo estar capacitado para mostrarme enérgico.

§ Seré enérgico en la defensa de mis puntos de vista o de mis derechos, sin que eso signifique mostrarme desagradable, antipático o deliberadamente insultante

§ Actuaré con firmeza ante los comportamientos abusivos de los demás

§ Expresaré con coraje mis convicciones, pero también tendré una alta consideración y respeto con las convicciones de los otros.

§ Haré las cosas del modo como lo crea más conveniente, al margen de cómo lo hagan los demás o de cómo se ha hecho siempre.

§ Elegiré mi propio camino, asumiendo la aventura de explorar la senda desconocida.

§ Lo importante no es agradar o apaciguar, o lograr aceptación o popularidad.

§ Descartaré los sentimientos de culpa que se deriven de no complacer las expectativas de los demás.

§ Haré esfuerzos por no depender de las opiniones, los juicios o el reconocimiento de los demás

§ No permitiré que mi vida sea dirigida o dominada por las prioridades o expectativas de los demás.

§ Lo esencial no es agradar a los demás o ser aceptado por los demás.

§ No reaccionaré exageradamente ni a la defensiva por las culpas que se me atribuyan.

§ Pasaré por alto actitudes y comportamientos de otras personas que puedan parecerme irritantes, pero que no me perjudican en nada.

§ No me dejaré abrumar por el temperamento desabrido o por los desplantes o desaires de otras personas.

§ Intentaré dar consuelo o ayuda al “infeliz crónico”. Pero si mi ayuda o mis palabras no son bienvenidas, evitaré la compañía de tales personas

CONFIANZA EN SI MISMO. AUTOVALIA. NO COMPARARSE CON NADIE. CONCENTRARSE EN SU PROPIO POTENCIAL NO EN SUS LIMITACIONES.

§ Mi sentido de seguridad ha de provenir de mi integridad básica, y no de pretender gustar a los demás.

§ Mi sentido del mérito no radicará en gustar a otros o ser aceptado por los otros.

§ Creo profundamente en lo que hago.

§ La confianza en mi mismo es el primer peldaño del éxito

§ Saldré al encuentro de las críticas, confiaré en mí mismo, estaré preparado para aceptar las consecuencias de todas mis posiciones.

§ Creo en mi mismo lo suficiente para vivir de acuerdo con mis preferencias.

§ Tengo plena confianza en mi mismo, estoy convencido de mi propia valía.

§ Estoy convencido de mi propia valía.

§ Acometeré toda situación convencido de la idea de que puedo alcanzar la meta que me he propuesto.

§ Me desprenderé de la inclinación a buscar reconocimiento gratitud o aplausos por los logros obtenidos.

§ No me compararé con nadie. Basaré mi sentido de realización sólo en mi propio progreso, y no en la falta de progreso o en el lento progreso de los otros.

§ No permitiré que mi sensación de valor y seguridad personal provenga de compararme con los demás.

§ Me compararé sólo conmigo mismo, con lo mejor que yo puedo alcanzar.

§ No compararé mis acciones con las de los demás para decidir cómo he de actuar.

§ Me concentraré en mis posibilidades, no en mis limitaciones.

§ Tengo limitaciones, pero puedo cambiar.

ENFRENTAR LAS CONTRARIEDADES Y LOS PROBLEMAS.

§ No me preocuparé por cosas insignificantes o banales.

§ Veré los problemas como oportunidades de desarrollar mi carácter y mis talentos.

§ No permitiré ser atormentado por las frustraciones y los obstáculos inesperados

§ Mantendré una actitud serena, tanto ante las grandes presiones como ante las pequeñas contrariedades de la vida.

§ Promoveré la calma interior y la claridad mental cada vez que se presenten situaciones tensionantes.

§ Me abstendré de quejarme, renegar o despotricar frente a un contratiempo.

§ Ante una situación difícil me comprometo a esforzarme en resolver el conflicto; aplicar mis principios; escuchar con mente abierta; y pensar con claridad y honestidad.

§ No me preocuparé por cosas que no se pueden cambiar o corregir.

§ Ante problemas que se escapan totalmente a mi control, responderé con una actitud serena, aceptando auténtica y pacíficamente esos problemas, y aprendiendo a vivir con ellos, aunque no me gusten.

RACIONALIZACIONES, EXCUSAS. SUPRIMIR EL LENGUAJE DESTRUCTOR.

§ No inventaré disculpas.

§ No acudiré a excusas para explicar mis fracasos y debilidades o para absolverme de mi responsabilidad.

§ Seré sincero conmigo mismo, y me liberaré de las excusas y racionalizaciones que me impiden ser leal a lo mejor de mí mismo

§ Dejaré de poner excusas para explicar porqué no consigo hacer las cosas realmente importantes en mi vida.

§ Abandonaré las excusas y racionalizaciones con las que justifico el no dar lo mejor de mí mismo

§ Eliminaré de mi vocabulario frases referidas a mis enfermedades, mis temores o mi cansancio

§ Suprimiré de mi vocabulario los términos y frases quejumbrosas, las palabras negativas y el lenguaje autodestructor.

SUPERAR EL PASADO. VIVIR EL PRESENTE.

§ Abandonaré mi apego al pasado y no lo utilizaré como excusa para mi situación actual.

§ Soy libre de desprenderme de aquello que fui en el pasado.

§ No me obsesionaré con el pasado.

§ No me auto castigaré por lo que hice o dejé de hacer en el pasado.

§ Me propongo aprender del pasado y descartar todas las cosas desagradables que recuerde de él.

§ No dejaré escapar el presente, malgastando mis horas en hábitos inconvenientes.

§ Aprovecharé el momento presente, para que cada día de mi vida contribuya de un modo significativo a hacerme mejor.

§ Viviré plenamente inmerso en el presente.

§ No desperdiciaré el presente, deseando estar en otra parte o sintiéndome culpable por el pasado.

§ Tengo que vivir ahora, disfrutar ahora, hacer por la gente ahora.

§ Ahora es el momento de decir: “Tú eres importante para mí: algunas veces parece que lo olvido, pero no es así. Mi vida estaría muy vacía sin ti”.

COMUNICACIÓN AUTENTICA. ESCUCHAR. EXPRESARNOS.

§ Me preocuparé más por saber qué es lo correcto y menos por saber quién tiene la razón.

§ Evitaré toda comunicación engañosa, desleal o que no respete la dignidad de las personas.

§ Procuraré en primer lugar comprender, y después ser comprendido.

§ Me concentraré en entender los intereses del otro y no en la defensa a ultranza de mis posiciones.

§ Trataré siempre de comprender a la otra persona, sin condenarla ni rechazarla, sin juzgar ni predicar.

§ Valoraré el punto de vista de las otras personas.

§ Defenderé con firmeza mi posición pero mantendré al mismo tiempo un auténtico respeto por las ideas y puntos de vista de los demás.

§ Escucharé con afecto lo que siente la otra persona, sin ponerme a la defensiva.

§ Escucharé con todos mis sentidos, esforzándome por comprender profunda y completamente los intereses y preocupaciones de la otra persona.

§ Escucharé realmente con intención de entender, no de responder.

§ Con mesura, respeto y reverencia cultivaré la capacidad para escuchar primero.

§ Escucharé con atención, esforzándome por comprender realmente lo que la otra persona siente y piensa.

§ Escucharé a los demás con respeto.

§ Al escuchar a los demás, prestaré total atención, estaré presente por completo,

§ Escucharé con respeto, comprometiéndome a tratar de comprender el punto de vista del otro en profundidad.

§ Al escuchar a los demás concentraré auténticamente mi atención en sus intereses, preocupaciones, necesidades, expectativas, temores y dudas

§ Con valentía y consideración cultivaré la habilidad para lograr ser comprendido.

§ Me esforzaré en transmitir mi punto de vista con claridad y serenidad.

§ Abandonaré la tendencia a hablar y a enfrentarme de forma impulsiva.

§ Expresaré mis puntos de vista con coraje.

§ Cuando exprese lo que yo considero la verdad, no lo haré en tono de confrontación.

§ Antes de hablarle a un ser querido, a un amigo, a un compañero, optaré por la calma y el buen humor.

§ Opto por hablar serenamente, y expresar mi punto de vista con claridad, sin exaltación, sin ligerezas.

§ Al expresar mi punto de vista, no doy por sentado que los demás los aceptarán. Estoy abierto a que los demás disientan, formulen preguntas o expresen preocupaciones, a que no apoyen entusiastamente mis decisiones o propongan alternativas.

CONFIAR EN LOS DEMÁS. CONSIDERACIÓN. RESPETO POR LOS DEMÁS. RECONOCER LAS VIRTUDES Y EXITOS DE LOS DEMAS. NO ETIQUETAR NI ESTIGMATIZAR. NO COMPARAR A LOS DEMÁS.

§ Creo en el potencial de todos los demás, reconozco sus puntos fuertes y sus capacidades.

§ No permitiré que mi domine la desconfianza, la agresividad, la defensividad y la apatía.

§ Miraré a los demás con los ojos de la fe; asumiré lo mejor de los otros.

§ Mi punto de partida es creer en las buenas intenciones de los demás, de creer que las personas no tienen la intención de ser ruines, tramposas o manipuladoras.

§ Trataré a los demás acorde con su potencial, no con su comportamiento.

§ Daré a la gente por buena hasta que fehacientemente me de cuenta de lo contrario. Incluso entonces consideraré que tienen energía para cambiar y que puedo ayudarles en la tarea.

§ Creo en el potencial de los demás, en sus puntos fuertes y sus capacidades.

§ Seré honesto con mis sentimientos y pensamientos, sin llegar al extremo de la honestidad imprudente o insensible.

§ No exigiré a nadie la perfección puesto que yo no soy perfecto.

§ No creeré nunca en haber progresado cuando descubro las debilidades ajenas.

§ No sentiré alegría por los errores ajenos.

§ Tendré siempre presente que el descubrir las debilidades ajenas no significa haber logrado un progreso personal.

§ Consideraré las debilidades de los demás como oportunidades de brindar ayuda.

§ No compararé a los demás conmigo mismo ni con otras personas.

§ He de comparar a las personas únicamente con respecto a ellas mismas y con sus propias potencialidades.

§ Haré todo lo que pueda por evitar encasillar a las personas.

§ Me niego a etiquetar, estereotipar, clasificar y prejuzgar a los demás.

§ No etiquetaré a los demás por sus éxitos o sus fracasos del pasado.

§ No dejaré pasar un solo día sin reconocer y resaltar algo positivo en mis seres queridos.

§ Estaré atento a reconocer y exaltar los atributos y cualidades de los demás.

§ Apoyaré y animaré los demás en sus proyectos, sus realizaciones, sus logros, sus victorias.

§ No caeré en la tentación de arrastrar por el suelo el nombre de otra persona

§ Nunca haré burla de los demás.

§ No menospreciaré ni abochornaré a nadie.

§ No haré ni diré nada que degrade o deshonre a otro ser humano.

§ Seré auténticamente respetuoso con los sentimientos y convicciones ajenos.

§ Me abstendré de clasificar las metas e intereses de los demás como ridículos, poco interesantes o falsos.

§ Respetaré y valoraré las metas e intereses de las otras personas.

§ Evitaré las pequeñas asperezas, las pequeñas faltas de respeto, que debilitan enormemente las relaciones.

§ Respetaré los derechos de las otras personas.

§ No intentaré obligar a los demás a creer y vivir como yo.

§ Me abstendré de la displicencia o de decir cosas negativas a los demás

§ No acudiré al cinismo, al sarcasmo, al humor incisivo o a la crítica áspera.

§ Trataré a los demás con dignidad y respeto.

§ Eliminaré de mi vocabulario comentarios que denigran y frases que puedan resultar calumniosas.

§ Respetaré el derecho de los demás a su intimidad y a no tener que dar explicaciones a cada momento.

§ Debo ver las debilidades de los otros con compasión, no acusadoramente

CRITICAS A LOS DEMÁS. GUARDAR CONFIDENCIAS. INTEGRIDAD EN NUESTRAS RELACIONES CON LOS DEMAS. JUICIOS SOBRE LOS DEMAS. LEALTAD CON LOS QUE NO ESTAN PRESENTES.

§ Cuando formule una crítica, lo haré motivado por un interés genuino en el bienestar y el progreso de la otra persona.

§ Cuando formule una crítica a otro, lo haré con respeto y cordialidad.

§ Para formular una crítica a otro, elegiré el momento oportuno y lo haré en privado.

§ Procuraré no hablar de nadie en términos negativos

§ No me dejaré seducir por el placer malévolo de mostrarme chismoso y crítico.

§ Me alejaré del hábito de culpar, acusar, criticar, juzgar, descalificar o censurar a los demás.

§ Sabré guardar un secreto y mantendré en reserva algo que se me ha confiado.

§ No traicionaré confidencias; respetaré la confianza que los demás depositan en mi

§ No incurriré en duplicidad, engaños ni hipocresía.

§ Seré sincero, directo y no manipulador.

§ Tendré presente que los juicios negativos que se hacen sobre las otras personas pueden estar basados en malentendidos, falta de información o ligereza.

§ Evitaré saltar a conclusiones arbitrarias o hacer conjeturas sobre los motivos e intenciones ajenos.

§ Seré ecuánime, escucharé a ambas partes antes de juzgar. Me acordaré de las otras personas implicadas.

§ Dejaré de emitir juicios o de clasificar a las personas basándome en las apariencias, los éxitos y las posesiones.

§ Al opinar sobre alguien, haré todo lo posible por ser decente y justo

§ Seré muy cuidadoso de no emitir juicios basados en impresiones de segunda o tercera mano.

§ No juzgaré a la gente por cualidades superficiales, ni calificaré a un ser humano de malo sólo porque pueda haberse comportado mal.

§ Me abstendré de juzgar a los otros, otorgándoles el beneficio de la duda

§ Pondré énfasis en las virtudes y fortalezas de los demás, no en sus faltas y deficiencias.

§ Defenderé a los que no están presentes.

§ No permitiré que se hable de personas no presentes faltándoles al respeto, o en una forma que los degrade o disminuya su credibilidad ante los ojos de los demás.

§ Si voy a hablar de los demás, lo haré como si estuvieran presentes.

§ Seré leal con quienes no están presentes.

OPINIONES, JUICIOS Y CRITICAS QUE FORMULAN LOS DEMAS. CONFRONTACIÓN Y DESACUERDOS CON LOS DEMAS.

§ No me sentiré amenazado por las comparaciones o las críticas.

§ No me atormentaré por las opiniones de los demás ni me la pasaré preguntándome cómo será recibida mi acción

§ Valoraré positivamente las actitudes o preguntas francas y honestas.

§ Conservaré la calma, cuando mi prójimo se muestre áspero.

§ Abandonaré la tendencia a enfrentarme con los demás de forma impulsiva.

§ No responderé a los argumentos contenciosos ni a las acusaciones irresponsables.

§ Me liberaré de la necesidad de responder y justificar.

§ No acudiré a la huida, en ninguna de sus formas

§ Haré oídos sordos a las discusiones hostiles.

§ Cuando me comunique con alguien desde posiciones aparentemente antagónicas, seré capaz de establecer una distinción entre la persona y el problema.

CUANDO ALGUIEN COMETA UN ERROR. ENSEÑAR EN EL MOMENTO OPORTUNO.

§ Tendré presente que ante el error, debemos averiguar las causas, descubrir lo que se puede ganar de la experiencia, y luego avanzar.

§ En lugar de criticar, me esforzaré en revisar el error con los involucrados, discutiéndolo juntos, siendo honestos y receptivos.

§ Hablaré con quien pudo haber originado el error, no con el propósito de buscar culpables, sino con la intención de comprender, buscar entre todos la solución, y ayudar.

§ Al confrontar los errores o equivocaciones de los demás, lo haré guiado por un auténtico tacto, preocupación y calidez hacia ellos.

§ Buscaré el momento más propicio para tratar de transmitir una enseñanza

§ Si he de transmitir una enseñanza, debo estar motivado por sentimientos de afecto, respeto y seguridad interior.

APORTACIÓN. SERVICIO. CONTRIBUCIÓN. GENEROSIDAD. DESAPEGO. INTERES POR EL OTRO. EMPATIA.

§ Antepondré las personas a las cosas o las actividades programadas.

§ Cuanto más me desarrolle, podré dar más de mi.

§ Me resistiré a la tentación de buscar ser alabado.

§ Pondré todo mi empeño en ser un mejor oyente, un profesional más dedicado, un compañero más cooperativo.

§ Cultivaré un auténtico espíritu de contribución con los demás.

§ No les estaré recordando a los otros cuando les haga un favor, y no olvidaré jamás cuando me lo hagan a mí.

§ Me esforzaré en tratar de mejorar la calidad de vida de los demás en lugar de ocuparme tan sólo de mi mismo.

§ Tendré siempre presente que la más grande realización en la superación personal proviene de la facultad de acercarme y ayudar al prójimo.

§ Me esforzaré en vivir ajeno a la necesidad de buscar gratitud o reconocimiento, haciendo las tareas que me he propuesto sencillamente porque considero que es lo que debo hacer.

§ Valoraré la felicidad de los demás en la misma forma en que valoro mi propia felicidad.

§ Procuraré estar menos aferrado a las cosas que he acumulado y a dar más de mi mismo a los demás.

§ Seré generoso, servicial, altruista y sensible.

§ Ayudaré a los demás sin tener la expectativa de obtener publicidad ni recompensa por ello.

§ Dedicaré más energía a dar que a pedir y recibir.

§ Evitaré sentir alegría por los errores o el sufrimiento ajeno.

PEDIR PERDON. PERDONAR.

§ Perdonaré a todo aquel que yo crea que me agravió en el pasado.

§ Perdonaré y olvidaré compasivamente las ofensas que me infieran.

§ Admitiré mis errores, me disculparé y pediré perdón, sin excusas, explicaciones ni defensas.

§ Cuando me disculpe, lo haré de todo corazón y no de mala gana.

§ No almacenaré reproches y recuerdos para hacer sentir culpables a los demás y sentirme yo también alterado.

§ Le daré siempre una segunda oportunidad a los demás.

§ Si alguien me ofende sin querer y sigue haciéndolo, tomaré la iniciativa para aclarar la situación, con buen ánimo, no con un espíritu vengativo y colérico.

§ Me esforzaré en perdonar con facilidad, olvidar las ofensas y no guardar rencor.

§ Erradicaré cualquier deseo de venganza y lo sustituiré por el del perdón.

EXPRESAR EL AMOR Y EL AFECTO.

§ Me comunicaré con el corazón, no con “fórmulas para el éxito”

§ Haré sentir a mis seres queridos mi preocupación por ellos.

§ Dedicaré más tiempo a mis seres queridos. Les demostraré y les haré sentir cuanto me importan.

§ Trataré a mis seres queridos con amor. Les expresaré mi afecto con un saludo vivaz, una sonrisa, un abrazo, un beso.

§ Le diré a mis seres queridos las virtudes que observo en ellos.

§ Al saludar en las mañanas a mis seres queridos, lo haré con fuerza y amor, mirándolos a los ojos y diciéndoles, aunque sin palabras: “Tenerlos un día más es un nuevo regalo que me da la vida”.

§ Prestaré atención a las pequeñas bondades y atenciones que confirmen mi preocupación y genuino interés por los demás.

TU FAMILIA. TU HOGAR.

§ Asumo mi matrimonio como un proyecto permanente, en el que tenemos un compromiso mutuo que es total, completo y para siempre.

§ Me comprometo a hacer feliz a (...) y ayudarle a su crecimiento espiritual.

§ Me esforzaré en dedicar tiempo y esfuerzo a cultivar la relación con mi esposa, con abnegación, cuidado, ternura y consideración.

§ Me esforzaré en ser para mis hijos el mejor ejemplo posible, y en que mi existencia sea para ellos un modelo de vida.

§ Haré todo lo que esté a mi alcance para que en mi familia predomine un clima de amor recíproco, armonía, confianza y responsabilidad.

§ Me esforzaré en ser un esposo afectuoso y un padre dedicado, comprensivo, coherente y cariñoso, fuente de amor y apoyo incondicional.

§ Consideraré los problemas de mis hijos como oportunidades para construir la relación y brindar ayuda.

§ Asumiré una actitud amorosa y dispuesta a comprender en profundidad y a ayudar a mis hijos.

§ No me impacientaré por la falta de respuesta o la ingratitud aparentes de mis seres queridos.

§ Reafirmaré permanentemente la autoestima de mis hijos, creyendo en ellos y brindándoles mucha retroalimentación positiva.

§ Mostraré permanentemente confianza en mis hijos creyendo firmemente en su potencialidad.

§ No compararé a mis hijos entre sí ni con otras personas.

§ Desterraré cualquier mensaje o actitud que ponga en tela de juicio o que lesione la autoestima de mis hijos y su sentido del valor propio.

§ Jamás acudiré a comportamientos que deterioren la relación con mis hijos.

§ Cuando mis hijos se porten de modo inmaduro y egoísta, responderé con sabiduría, amor, firmeza, generosidad y autocontrol.

§ Tendré presente siempre que es mucho más importante el propósito y los sentimientos de la familia, que el control, la eficiencia y las reglas.

§ Me empeñaré en amar profundamente a mi familia, y ser para ella fuente de amor y apoyo incondicionales.

§ Prestaré suma atención a las metas de los integrantes de mi familia.

§ Llegaré a mi hogar primero que todo con la mente y con el corazón.

TUS AMIGOS.

§ Me esforzaré por ser un buen amigo, retribuir con honestidad, comunicarme con autenticidad.

§ Renovaré de forma continua mi compromiso con las cosas que me unen a mis amigos.

ACUERDOS MUTUAMENTE BENÉFICOS. RIVALIDAD, COMPETENCIA, COOPERACIÓN. MENTALIDAD DE ABUNDANCIA. VALORAR LAS DIFERENCIAS.

§ Cuando me encuentre en el proceso de buscar un acuerdo con alguien, persistiré en el proceso de comunicación, hasta que surja una solución que agrade a ambos y que sea mutuamente benéfica

§ Buscaré el beneficio común y soluciones o alternativas que sean satisfactorias para todos.

§ Mi interés no es hacer las cosas mejor que el prójimo; sino mejorarme cada día como ser humano.

§ Mi felicidad no puede depender de derrotar a algún semejante.

§ El perder no tiene porqué producir auto denigración y enfado conmigo mismo y con los demás.

§ Daré siempre a los demás el reconocimiento que les corresponda

§ Me alegraré por los éxitos y triunfos de los demás, especialmente cuando se trata de miembros de mi propia familia o de amigos íntimos, asociados o compañeros.

§ Compartiré el prestigio, el reconocimiento, el mérito y la toma de decisiones.

§ Contribuiré al éxito de los demás y facilitaré el éxito de los que trabajan conmigo.

§ Desterraré de mi vida la envidia. Me alegraré cuando los demás triunfen.

§ No sentiré envidia por los logros ajenos.

§ Apreciaré y respetaré las diferencias y valoraré el punto de vista de las otras personas.

§ Valoro trabajar con otros, pues tengo presente que los demás poseen conocimientos y experiencias que yo no tengo.

§ Tendré presente que si una persona inteligente y competente disiente de mi, debe haber algo en su desacuerdo que yo no entiendo, y que necesito entender.

§ Debo confiar en el otro, escucharlo con respeto, valorar las diferencias y comprometerme a tratar de comprender sincera y profundamente los puntos de vista, las necesidades, deseos y perspectivas de los demás.

§ Mantendré la disposición a aprender de los demás, y valorar los diferentes puntos de vista, juicios y experiencias que pueden tener los otros.

EL VALOR DEL TRABAJO. DELEGAR. HABITOS PARA UNA INTERACCION EFICAZ EN EL TRABAJO. RESPONSABILIDAD EN EL TRABAJO. QUE LAS PREOCUPACIONES LABORALES NO LO ASFIXIEN

§ Doy gracias por tener la oportunidad de trabajar.

§ Mi trabajo es una oportunidad de crecer como persona y como profesional, perfeccionar mi carácter, aprender nuevas habilidades y mejorar mi capacidad de enfrentar desafíos.

§ He tomado la decisión de dejar de ver defectos en mi trabajo diario.

§ Estaré dispuesto a delegar, de forma que los demás estén motivados interiormente y satisfagan sus propias expectativas.

§ Estimularé una alta motivación en aquellos que trabajan conmigo o dependan de mí.

§ Permitiré a las personas elegir sus métodos, concentrándome en orientar sobre los resultados deseados.

§ Mi actitud básica al delegar estará fundamentada en la paciencia, el autocontrol, la fe en la potencialidad de los demás y el respeto por las diferencias individuales.

§ Me consagraré a mis tareas profesionales con honradez e integridad.

§ No concederé más importancia a mis actividades laborales que a mi propia felicidad o la de mi familia.

§ Dejaré para mañana las tareas y preocupaciones laborales cuando abandone la oficina.

§ Le daré prioridad a hablar sobre los sentimientos de los miembros de la familia, de sus éxitos, de sus ambiciones, en vez de machacar continuamente sobre mis problemas laborales.

41. EL VALOR DEL TRABAJO. DELEGAR. HABITOS PARA UNA INTERACCION EFICAZ EN EL TRABAJO. SISTEMAS ORGANIZACIONALES. LEALTAD.

EL VALOR DEL TRABAJO. DELEGAR. HABITOS PARA UNA INTERACCION EFICAZ EN EL TRABAJO. SISTEMAS ORGANIZACIONALES. LEALTAD A EMPRESA Y LEALTAD A SI MISMO. REPLANTEAMIENTOS SOBRE SU MUNDO LABORAL. RIQUEZA MATERIAL

EL VALOR DEL TRABAJO.

Asume tu trabajo como una oportunidad de crecer como persona y como profesional, perfeccionar tu carácter, aprender nuevas habilidades y mejorar tu capacidad de enfrentar desafíos.

Toma la decisión conciente de dejar de ver defectos en tu trabajo diario. Practica la gratitud por tener la oportunidad de trabajar.

La seguridad económica no reside en el empleo que tenemos. Reside en nuestra capacidad para producir: pensar, aprender, crear, adaptarnos. Esa es la verdadera independencia económica. No consiste en tener riquezas, sino en el poder para producirlas. Es intrínseca.

DELEGAR.

Quienes no saben o no están dispuestos a delegar, tienden a creer que la solución para la mayoría de los problemas es que ellos mismos pongan manos a la obra y hagan ellos mismos las tareas, hasta quedar agotados. He aquí la razón por la cual sus operaciones siempre siguen siendo pequeñas y sus negocios de corto vuelo. Sencillamente no saben cómo delegar de forma que los demás estén motivados interiormente y satisfagan sus expectativas. Cuando intentan delegar, a menudo concluyen afirmando: “Me lleva más tiempo explicarlo y capacitar a una persona para realizarlo que hacerlo yo mismo”. Así que ceden y vuelven a aplicarse a hacer ellos mismos las cosas, hasta quedar exhaustos, irritables, críticos y disgustados porque los demás no han colaborado más. Este tipo de personas sobre reaccionan ante los errores y corren a corregirlos. Siempre están encima de los demás y controlan todo constantemente, socavando así la motivación de los demás.

La delegación eficaz se centra en los resultados y no en los métodos. Se le permite a las personas elegir sus métodos y las hace responsables de los resultados. Al principio lleva más tiempo, pero es un tiempo bien invertido.

La delegación eficaz demanda valentía emocional puesto que permitimos, en mayor o menor grado, que los demás cometan errores con nuestro tiempo, dinero y buen nombre. Esta valentía está fundamentada en la paciencia, el autocontrol, la fe en la potencialidad de los demás y el respeto por las diferencias individuales. La delegación eficaz debe ser recíproca: responsabilidad asignada, responsabilidad recibida.

HABITOS PARA UNA INTERACCION EFICA EN EL PROCESO DE CONSECUCIÓN DE METAS CONJUNTAS. .

He aquí algunos hábitos para una interacción eficaz en el trabajo y en el proceso de consecución de metas conjuntas mediante la delegación y la cooperación:

Resultados deseados.

Enunciar claramente los resultados deseados, identificar lo que hay que hacer y cuándo, y permitir a las personas elegir sus métodos de hacer las cosas.

Crear una comprensión clara y mutua de lo que hay que lograr, concentrándose en el qué y no en el cómo; en los resultados, no en los métodos. Dedicar tiempo. Ser paciente.

Directrices

Brindar directrices, especificando los principios (parámetros, restricciones, políticas, etc.) que enmarcan los resultados que se quieren alcanzar y dentro de los cuales debe actuar el individuo. Si usted conoce las rutas potenciales que llevan al fracaso, identifíquelas, señalando lo que no hay que hacer, pero NO diciendo qué hay que hacer. Que sean ellos los responsables de realizar lo necesario sin salirse de las directrices.

La fijación de directrices forma parte de una primera fase en la se establece el acuerdo inicial. De ello debe resultar que la gente tenga una clara comprensión de qué es lo que se espera de ella y de qué recursos, autoridad, campo de acción y orientaciones dispone.

Recursos

Identificar el apoyo (humano, económico, técnico u organizacional) y los recursos con los que se cuenta para lograr los resultados deseados.

En esta fase es crucial el apoyo a los delegados. El supervisor se transforma en una fuente de ayuda para ellos y en su abogado, no en un temido adversario. Les suministra recursos, allana obstáculos, apoya sus acciones y decisiones, da orientación, suministra capacitación y comparte la retroalimentación.

Rendición de cuentas

Establecer las normas de rendimiento que se utilizarán en la evaluación de los resultados y el momento específico en que esa evaluación tendrá lugar. Se trata en gran medida de un proceso de auto evaluación, puesto que los delegados son supervisados por sus resultados, es decir, por su desempeño real.

Consecuencias

Especificar las consecuencias de alcanzar o no los resultados. Precisar lo que sucederá, lo bueno o lo malo, como resultado de la evaluación.

Con individuos inmaduros, hay que establecer menos resultados deseados y más directrices; identificar más recursos; realizar entrevistas más frecuentes de rendición de cuentas, y aplicar más consecuencias indirectas.

Con personas más maduras, los resultados deseados pueden ser más desafiantes, hay menos directrices, una rendición de cuentas menos frecuente, y criterios menos mensurables pero más discernibles.

SISTEMAS ORGANIZACIONALES

La filosofía gano/ganas da resultado y sólo puede sobrevivir en una organización cuando los sistemas le brindan sustento Si uno habla en gano/ganas, pero recompensa en gano/pierdes, tiene entre las manos un programa perdedor.

El espíritu de gano/ganas no puede sobrevivir en un medio de competencia y confrontación. Para que el paradigma gano/ganas dé resultado los sistemas tienen que brindarle sustento.

Todos los sistemas de la organización tienen que basarse en el principio de gano/ganas: el sistema de adiestramiento, el sistema de planificación, el sistema de comunicaciones, el sistema presupuestario, el sistema informativo, el sistema de recompensas.

Muy a menudo el problema reside en los sistemas, no en la gente. Si se sitúa a buenas personas en malos sistemas los resultados serán malos. Uno tiene que regar las flores que pretende que crezcan. Los sistemas gano/ganas crean el ambiente que sustenta y refuerza los acuerdas gano/ganas.

LEALTAD A LA EMPRESA Y LEALTAD A SÍ MISMO.

Si es a costa de su propia felicidad, nada merece que le consagre usted su existencia. La doctrina de la lealtad a las cosas y a las instituciones es una adhesión tiránica que puede usted afrontar victoriosamente. No conceda usted más importancia y envergadura a sus tareas que a su felicidad, entonces se está avasallando usted a sí mismo o se está dejando hundir en la condición de víctima.

Lealtad no significa esclavitud. Uno puede ser fiel a determinada organización y consagrarse a sus tareas con honradez e integridad, sin tener que convertirse en su siervo. La persona más importante del mundo, a la que debe ser inquebrantablemente leal, es usted mismo. Uno sólo dispone de una vida y dejar que la controle una empresa o cualquier otra institución es particularmente insensato, cuando se considera la gran cantidad de alternativas que se ofrecen.

La forma en que emplee su lealtad corre totalmente por su cuenta. Puede convertir en las cosas más importantes de su vida alcanzar la felicidad y atender las responsabilidades de ayudar a los miembros de su familia. No tiene que explicárselo a nadie, pero puede empezar a hacer que su vida funcione en torno al concepto de lealtad a usted mismo. Es muy probable que descubra que gracias a ello es usted incluso más productivo en su trabajo y de trato mucho más agradable.

Usted puede planear activamente el empleo de su tiempo de modo que se encamine hacia la felicidad, la salud y, lo que es más importante, la satisfacción.

¿Porqué no sitúa a la empresa o a la institución que sea en la perspectiva adecuada y empieza a tratarla, en el mejor de los casos, como un mecanismo a través del cual recibe usted un precio justo a cambio de una grata, estimulante, productiva y satisfactoria utilización de sus aptitudes?.

REPLANTEAMIENTOS FRENTE A SU MUNDO LABORAL

Valore sus prioridades vitales con las personas que para usted son más importantes. Hable con sus familiares acerca de su conducta (la de usted) y de lo que busca. Pregúnteles qué opinan respecto a las responsabilidades laborales de usted y si se sienten desatendidos. Elabore una relación de las cosas que usted pretende alcanzar y porqué desea lograrlas. Luego eche un vistazo a su propio comportamiento. ¿Avanza usted hacia la realización personal que aspira conseguir o se va hundiendo en un hoyo cada vez más profundo?. Uno sólo puede volver las cosas del revés cuando ha puesto todo el asunto en perspectiva y empieza a vivir su vida día a día, lanzado en persecución de la felicidad y no de la neurosis.

Alivie su mente de las tensiones a que la somete el mundo laboral. Encárguese de que su cerebro trabaje en forma auto realizadora. Acostúmbrese a dejar la tarea a su espalda cuando abandone la oficina. Deje de repasar todo lo que sucedió durante la jornada y deje de preocuparse por el modo en que se desarrollarán sus asuntos profesionales durante el día siguiente o el año que viene. En vez de machacar continuamente sobre sus problemas laborales, aprenda a hablar de los sentimientos de los miembros de la familia, de sus éxitos, de sus ambiciones.

RIQUEZA MATERIAL.

§ “Quienes creen que el dinero lo hace todo, terminan haciendo todo por dinero”. Voltaire.

§ “Ganarse la vida no basta. El trabajo también tiene que hacer una vida”. Peter Drucker, profesor de administración.

Las personas y los seres vivos constituyen todo lo que importa. Sin la vida alrededor para compartir, dar y recibir, uno no tiene posibilidad alguna de alegría. De llevarse de aquí toda la vida, en el mundo no quedaría nada que tuviera o proporcionara significado. La vida es lo único que cuenta.

No hace falta mucha riqueza material para ser feliz. Observe la capacidad que tienen los niños de disfrutar simplemente con el hecho de estar vivos. Lo mismo puede hacer usted, siempre y cuando esté dispuesto a reordenar su lista de prioridades y poner el acento sobre lo que realmente importa: la vida en sí misma.

40. PARADIGMAS DE LA INTERACCIÓN HUMANA. FUNDAMENTOS DEL PARADIGMA “GANO/GANAS”. ACUERDOS MUTUAMENTE BENÉFICOS. SINERGIZAR, TRABAJAR EN EQUIPO.

PARADIGMAS DE LA INTERACCIÓN HUMANA. FUNDAMENTOS DEL PARADIGMA “GANO/GANAS”. ACUERDOS MUTUAMENTE BENÉFICOS. SINERGIZAR, TRABAJAR EN EQUIPO. BUSCAR TERCERAS ALTERNATIVAS. RIVALIDAD, COMPETENCIA, COOPERACIÓN. ACTITUDES PARA EL LIDERAZGO

PARADIGMAS DE LA INTERACCIÓN HUMANA

“Gano / ganas”

El paradigma gano/ganas es una actitud y una estructura de la mente y del corazón que constantemente procura el beneficio mutuo en todas las interacciones humanas.

Al aprender a pensar según gano/ganas, buscamos el beneficio mutuo en todas las interacciones. Deseas ganar, y también deseas que la otra persona gane. En esta perspectiva, “ganar” no significa que la otra deba perder; significa alcanzar nuestros objetivos. Ello supone el compromiso de interactuar y persistir en el proceso de comunicación hasta que surja una solución que agrade a ambos y que sea mutuamente benéfica. Para que ello sea posible debes confiar en el otro, escucharlo con respeto, valorar las diferencias y comprometerte a tratar de comprender su punto de vista a profundidad.

Al expresar nuestro punto de vista o nuestras ideas con relación a algún asunto, no esperemos que los demás los acepten. Estemos abiertos a que los demás disientan, formulen preguntas o expresen preocupaciones, o a que no apoyen entusiastamente nuestras decisiones o propongan alternativas.

Gano/ganas ve la vida como un escenario cooperativo, no competitivo. Se basa en el paradigma de que el éxito de una persona no se logra a expensas o excluyendo el éxito de los otros. Gano/ganas es una creencia en la tercera alternativa. No se trata de tu éxito o el mío, sino de un éxito mejor, de un camino superior.

Gano/ganas supone confianza, escucharnos con respeto, comprometernos a tratar de comprender el punto de vista del otro a profundidad, y a trabajar juntos a favor de la tercera alternativa, de la solución sinérgica, que será una respuesta mejor para los dos. Se elimina la energía negativa centrada en las diferencias de personalidad y de posición, y crea una energía positiva, cooperativa, centrada en la comprensión plena de los problemas y en su resolución mutuamente benéfica.

Pensar en gano ganas es el hábito del liderazgo interpersonal. Supone aprendizaje recíproco, influencia mutua, beneficios compartidos. Para crear esos beneficios mutuos se necesita mucho coraje y también consideración, en particular si interactuamos con personas profundamente programadas con el paradigma gano/pierdes

El principio del gano/ganas se cultiva en un ambiente en el que la estructura y los sistemas se basan en gano/ganas. No podemos alcanzar fines gano/ganas con medios gano/pierdes o pierdo/ganas.

Gano / Pierdes

Las mentes defensivas no son creativas ni cooperativas. Sin duda, hay lugar para el pensamiento de gano/pierdes en situaciones verdaderamente competitivas y de baja confianza. Pero la mayor parte de la vida no es una competencia. No tenemos porqué vivir compitiendo con nuestro cónyuge, nuestro hijos, nuestros colaboradores, nuestros vecinos, nuestros amigos, etc. La mayor parte de la vida es una realidad interdependiente. La mayoría de los resultados a los que uno aspira dependen de la colaboración de todos.

La mentalidad de gano/pierdes no conduce a la cooperación y al desarrollo de lo mejor de nosotros. Por el contrario, la premisa de que una persona tiene que perder para que otra pueda ganar, tiende a minar lo mejor que hay en nosotros. Nos vuelve maliciosos y desconfiados, lo que nos lleva a retener información o a distorsionarla; nos incita a caricaturizar a los demás, a ser intolerantes frente a la incertidumbre y el cambio, y estrecha tanto nuestra visión que la creatividad constructiva prácticamente queda anulada.

La competitividad dominada por la perspectiva del gano/pierdes genera desconfianza, o la agrava, y llega a convertirse en una fuente de conflictos improductivos. Se generan comparaciones hostiles y distracciones constantes que constituyen un desperdicio de energía e impiden avanzar con éxito. Dominar a los otros en una competencia en la que alguien tiene que perder para que otro gane – es un indicador muy pobre del éxito o buen desempeño.

Si estamos frente a alguien que piense en términos de gano/pierdes, y estamos decididos a crear una interacción gano/ganas, mantén la cortesía, el respeto y el aprecio auténticos de la otra persona y de su punto de vista; no te vuelvas reactivo; ahonda en ti mismo en busca de la fuerza de carácter necesaria para ser proactivo; escucha más y con mayor profundidad; expresa tus punto de vista con coraje, pero persiste hasta que la otra persona empiece a comprender que quieres auténticamente una solución que represente una verdadera ganancia para ambas partes.

Y cuanto más fuerte es uno –cuanto más genuino es su carácter, más alto el nivel de proactividad, y más comprometido está realmente con el paradigma gano/ganas- mayor será la influencia sobre la otra persona.

Pierdo / Ganas

Algunas personas se han auto programado a la inversa: pierdo/ganas. Su paradigma se expresa en actitudes concientes o inconcientes del tipo:

“Adelante; imponme lo que quieras”;
“Soy un perdedor; siempre lo he sido”;
“Soy un conciliador; haré cualquier cosa para conservar la paz”.

Las personas que piensan en pierdo/ganas por lo general están deseosas de agradar o apaciguar. Buscan fuerza en la aceptación o la popularidad. Tienen poco coraje para expresar sus sentimientos y convicciones, y la fuera del yo de los demás los intimida fácilmente.

En una negociación, pierdo/ganas se traduce en una capitulación, en ceder o renunciar.

Como estilo de liderazgo, pierdo/ganas significa ser “un tipo formidable” pero que se lo pasan siempre por la galleta.

Pierdo / Pierdes

Pierdo/Pierdes es el resultado de la interacción de dos individuos del tipo Gano/Pierdes, es decir, personas resueltas, obstinadas y egoístas. Ambos perderán. Las dos se vuelven negativos y quieren recobrar lo que se les quite o “hacérselas pagar” al otro, ciegos al hecho de que la venganza es un arma de doble filo, de que el asesinato es la condena de uno mismo.

Pierdo/Pierdes es la filosofía del conflicto, la filosofía de la guerra. Es también la filosofía de las personas que son desdichadas y piensan que todos los demás también deben serlo.

Gano / Ganas O No Hay Trato

Significa que si no podemos encontrar una solución que beneficie a ambas partes, coincidimos n disentir de común acuerdo: no hay trato. Cuando se tiene presente la opción del “no hay trato”, se puede decir con honestidad: “trabajemos para lograr un acuerdo del tipo gano/ganas. Pero si no podemos, pongámonos de acuerdo en que no habrá trato.

Si uno no puede llegar a un acuerdo del tipo gano/ganas, es preferible no pactar, optado por la variante del “no hay trato”

FUNDAMENTOS PARA EL PARADIGMA GANO/GANAS: CARÁCTER; MADUREZ; MENTALIDAD DE ABUNDANCIA; CONFIANZA.

Carácter y madurez.

El carácter es la base del paradigma gano/ganas, y todo lo demás se erige sobre ese fundamento. Hay tres rasgos caracteriológicos para el paradigma gano/ganas es la madurez.

La madurez es el equilibrio entre coraje y consideración. Para recurrir a gano/ganas, uno no sólo tiene que ser amable, tiene que ser valiente. Lograr ese equilibrio entre coraje y consideración, es la esencia de la madurez real y fundamental para el gano/ganas.

MADUREZ.
Equilibrio entre:
CORAJE
CONSIDERACIÓN
Fuerza del yo
Empatía
Asertividad
Respeto por los demás
Auto confianza
Preocupación por los otros
“Yo estoy bien”
“Tú estás bien”
Rudeza
Amabilidad
Valentía
Sensibilidad
Preocupación por la tarea


Si tengo una puntuación alta en coraje pero baja en consideración, pensaré en términos de gano/pierdes. Seré fuerte y egocéntrico; tendré el valor de mis convicciones, pero poca consideración con las convicciones de los otros.

Si tengo una puntuación alta en consideración y baja e coraje, pensaré en términos pierdo/ganas. Tendré tanta consideración por las convicciones y deseos de los demás, que me faltará coraje para expresar los míos.

Si logro el equilibrio entre coraje y consideración, puedes escuchar, comprender empáticamente, pero también afrontar las cosas con coraje.

Mentalidad de abundancia.

Otro rasgo caracteriológico esencial para la actitud del gano/ganas es la mentalidad de la abundancia, la actitud de que en el mundo hay mucho para todos.

El resultado de la mentalidad de abundancia es que se comparten el prestigio, el reconocimiento, el mérito, las utilidades y la toma de decisiones. La mentalidad de abundancia también se manifiesta en nuestra capacidad de alegrarse cuando los demás triunfen, sentirse auténticamente felices por el éxito de otros, y contribuir a que ello suceda.

Las personas con mentalidad de escasez se sienten mal si tienen que compartir reconocimiento o mérito, poder o beneficios, incluso con quienes les ayudan en su generación o producción. También se sienten mal ante los éxitos d otras personas, incluso, y especialmente, cuando se trata de miembros de su propia familia o de amigos íntimos, asociados o compañeros.

Ente el éxito de los otros, la envidia los corroe. Su sentido de la propia valía proviene de las comparaciones, y el éxito de los otros en alguna medida significa su propio fracaso. Las personas con mentalidad de escasez siempre están comparando, siempre están compitiendo.




Confianza

§ “Puede que usted sufra una decepción si confía demasiado, pero vivirá atormentado si no confía lo suficiente”. Frank Crane, historiador y sociólogo.

La confianza es la esencia de la filosofía del tipo gano ganas. Sin confianza, nos falta la credibilidad necesaria para la comunicación y el aprendizaje abiertos, recíprocos, así como la creatividad real.

Como confiamos en el otro, estamos abiertos a todo. Ponemos nuestras cartas sobre la mesa. Incluso aunque veamos las cosas de distinto modo, nos escucharemos con respeto, comprometiéndonos a tratar de comprender el punto de vista del otro en profundidad, y a trabajar juntos a favor de la tercera alternativa, de la solución sinérgica, que será una respuesta mejor para los dos.

Si no tenemos confianza o una visión común de los resultados deseados tendemos a vigilar, controlar o dirigir. Pero si hay confianza y se posee un acuerdo inicial gano/ganas, en el que se define exactamente lo que se espera, nuestro rol es ser fuente de ayuda y recibir los informes de evaluación.

ACUERDOS MUTUAMENTE BENEFICOS

En la perspectiva gano/ganas, los acuerdos o soluciones son mutuamente benéficos, mutuamente satisfactorios. Con la solución gano/ganas, todas las partes se sienten bien por la decisión que se tome, y se comprometen con el plan de acción. No se trata de alcanzar tu éxito o el mío, sino de un éxito mejor, de un camino superior.

Adoptar una verdadera actitud gano ganas implica persistir en el proceso de comunicación, escuchando cuidadosamente a nuestra contraparte, para expresar después nuestro propio punto de vista con mayor coraje. Significa continuar la interacción en el espíritu del gano ganas hasta que se alcance una solución con la que todos los involucrados se sientan satisfechos.

En la perspectiva de lograr acuerdos que satisfagan a todos, es esencial empezar por dejar bien definidos los límites, las reglas, las expectativas y las consecuencias. Todo lo anterior hay que plantearlo claramente, acordarlo, asumirlo y respetarlo. La seguridad personal nace, en gran medida, de una sensación de justicia, de saber qué se espera de cada uno, cuáles son los límites, las reglas y las consecuencias. La vida puede escapársenos de control a causa de las expectativas inciertas, del cambio en los límites o de las reglas arbitrarias: un día tal cosa, al día siguiente tal otra.

SINERGIZAR, TRABAJAR EN EQUIPO.

La sinergia es el estado en el que el todo es superior a la suma de las partes. Las personas sinérgicas trabajan tan inteligente como duramente. Al trabajar en equipo desarrollan sus propios puntos fuertes y luchan por complementar sus debilidades con los puntos fuertes de los demás. No dudan en delegar para obtener resultados, puesto que creen en los puntos fuertes y capacidades de los otros. Y como no se sienten amenazados por el hecho de que otros sean mejores que ellos en algunos aspectos, tampoco sienten la necesidad de supervisarlos de cerca.

Una relación en la que ambas partes estén profundamente comprometidos en el paradigma gano/ganas, es la catapulta ideal de una gran sinergia. No se le resta realidad o importancia a los problemas o a las diferencias de perspectiva. Pero sí elimina la energía negativa normalmente centrada en las diferencias de personalidad y posición, y crea una energía positiva, cooperativa, centrada en la comprensión plena de los problemas y en su resolución recíprocamente beneficiosa.

La esencia de la sinergia consiste en apreciar y respetar las diferencias y valorar el punto de vista de las otras personas. Sinergizar significa también compensar las debilidades y construir sobre las fuerzas. Es la actitud de quien afirma: “Juntos podemos llegar a soluciones mucho más creativas, más apropiadas o más gratificante que cualquier solución a la cual tú o yo hubiésemos llegado sólos”. Valoramos trabajar juntos, teniendo la humildad de advertir que los demás poseen conocimientos y experiencias que no tenemos.

Cuando te comuniques con alguien desde posiciones aparentemente antagónicas, debes ser capaz de establecer una distinción entre la persona y el problema. Concéntrate en entender los intereses del otro y no en la defensa a ultranza de tus posiciones. Los demás descubren gradualmente tu sinceridad y se convierten en partes de un proceso creativo de resolución del problema. Acceden juntos a soluciones sinérgicas, que habitualmente son mucho mejores que cualquiera de las propuestas originales, así como opuestas a esas típicas soluciones de compromiso en las que cada parte cede un poco y gana un poco.

Si una persona inteligente y competente disiente de ti, piensa que debe haber algo en su desacuerdo que tú no entiendes, y que necesitas entender. Acepta con humildad que la otra persona tiene una perspectiva y un marco de referencia que tú necesitas percibir.

BUSCAR TERCERAS ALTERNATIVAS.

En la comunicación empática y sinérgica, las partes buscan entender sincera y profundamente los puntos de vista, las necesidades, deseos y perspectivas de los demás. Buscan una solución o alternativa que satisfaga integralmente a todos. Se comunican hasta que aparece una solución con la que todos se sienten bien, y que es mejor que cualquiera de las propuestas originales.

Enfrentados a dos alternativas – la nuestra y la “errónea” - podemos buscar una tercera alternativa sinérgica. Casi siempre existe esa tercera alternativa; si la buscamos con una filosofía de gano ganas, por lo general hallamos una solución mejor para todos.

Juntos podemos inventar soluciones de tercera alternativa mucho más creativas, más apropiadas, más maleables, más gratificantes que cualquier solución que hubiésemos elaborado solos.

Cuando esperamos que la gente vea las cosas de modo diferente, y valoramos esa diferencia, vislumbramos el uso sinérgico de dotes humanas para hallar soluciones basadas en una tercera alternativa.

RIVALIDAD, COMPETENCIA, COOPERACION.

Las personas sojuzgadas por el paradigma gano/pierdes son en muchos casos individuos consagrados a la competencia a toda costa. Sin embargo, como individuo, uno puede competir eficazmente dentro de la estructura institucional, sin cargar el acento equivocadamente y llevar la rivalidad a extremos perniciosos y, de manera más destructiva, a su propia vida personal.

La competencia se basa en un modelo de comportamiento creado sobre la necesidad de que los individuos sean más dinámicos, más listos, más ricos que el semejante. Ahí es donde se encuentra la sociedad capitalista. Habla de competencia como si nunca hubiese oído la palabra colaboración. Se niega a darse cuenta que la presión excesiva no mueve a las personas, las mata.

Todos los seres humanos valen lo suficiente para vivir, y uno puede ser feliz y sentirse realizado, sin tener que volver la cabeza para mirar a otras personas en busca de auto valía. Lo cierto es que las personas que funcionan a pleno rendimiento no albergan el menor interés en hacer las cosas mejor que el prójimo; su mirada es introspectiva, se proyecta sobre los objetivos de su existencia, y saben que la competición no hará más que reducir sus esfuerzos encaminados a lograr su deseo único. Mire hacia su interior, en vez de preocuparse de cómo ha de valorar al vecino.

Los resultados de la rivalidad excesiva.

La colaboración es un sistema mucho más eficiente para elevar el nivel de la vida de uno y de los demás. Cuando las personas se reúnen para ayudarse mutuamente, ello beneficia a todos cuanto intervienen en la operación.

Fenómenos y manifestaciones que cunden en la sociedad actual (drogadicción, alcoholismo, impotencia, fases depresivas, insomnio, etc.) son producto directo de una cultura que institucionaliza la competición. Pero uno no está obligado a caer víctima de esta mentalidad de competencia a ultranza, si las preferencias personales van por otro camino.

Sobre ganar y perder.

No se necesitan victorias sobre otros seres humanos para sentirse dueño de sí mismo, desde el interior, y sentirse contento y satisfecho. Nuestra felicidad no puede depender de que se derrote a algún semejante.

Ganar no lo es todo ni lo único. El auténtico hombre sensato persigue la victoria como si le importase … pero cuando la partida ha terminado, no vuelve la cabeza para contemplar y recrearse en su victoria, considerándola algo que valga la pena recordar. Sabe que no puede volver a vivirse lo que ya ha concluido, de modo que selecciona otra experiencia y se apresta a actuar en ella.

Cuando nos enseñamos a nosotros mismos que debemos alcanzar la victoria a toda costa, nos olvidamos que el fracaso es una parte natural y necesaria del proceso de aprendizaje. El perder no tiene porqué producir auto denigración y enfado con uno mismo y con los demás. Seguramente, uno puede considerar el triunfo como una hazaña cuya consecución representa algo tremendo, pero uno debería tener una certeza más absoluta de que su esencia como persona no depende del logro o no de esa gesta.

ACTITUDES PARA EL LIDERAZGO

Para ser un verdadero líder debes hacer un gran esfuerzo por reprimir la necesidad de reconocimiento y por frenar la influencia del ego. El verdadero líder actúa de tal manera que casi pasa desapercibido en todo el proceso. Da confianza y ánimo y sabe felicitar a los demás cuando encuentran su propio camino.

El verdadero líder guía sin poner trabas, dando confianza siempre que puede. Los líderes disfrutan de la confianza de los demás; pero para recibir confianza has de dar confianza.

El rol del líder consiste en dirigir siendo un modelo y dando la perspectiva, en motivar a través del amor y la inspiración, en construir un equipo complementario basado en el respeto recíproco, en mentalizarse hacia la eficacia, concentrados en los resultados y no en los métodos, sistemas y procedimientos.

He aquí algunas actitudes que aumentarán nuestra capacidad de ser líderes:

Persuasión

La persuasión: que incluye el compartir las razones y el razonamiento, defendiendo con firmeza su posición o deseo pero manteniendo al mismo tiempo un auténtico respeto por las ideas y perspectivas de los seguidores; el explicarles el porqué y el cómo; el comprometerse a mantener el proceso de comunicación hasta alcanzar beneficios mutuos y resultados satisfactorios.

Paciencia

La paciencia con el proceso y con la persona. Mantener, a pesar de los errores, defectos e inconvenientes causados por los seguidores y de la impaciencia y expectativas por alcanzar las metas que uno se ha fijado, una perspectiva de largo plazo y el compromiso de seguir fiel a sus objetivos ante los obstáculos y contratiempos inmediatos.

Delicadeza

La delicadeza, en oposición al rigor, la dureza y la presión extrema, cuando deben afrontar los puntos vulnerables, los desplantes y los sentimientos que pueden expresar los demás.

Disposición a aprender de los demás

La disposición a aprender de los demás, que significa actuar con el supuesto de que uno no tiene todas las respuestas ni todos los datos, y valorar los diferentes puntos de vista, juicios y experiencias que pueden tener los seguidores.

Aceptación

La aceptación, el abstenerse de juzgar a los otros, otorgándoles el beneficio de la duda, sin exigirles como condición para afirmar su alta autoestima, y que presenten pruebas de su desempeño específico.

Bondad

La bondad, la sensibilidad, la preocupación, la consideración para con los demás; tener presente esas pequeñeces, que son en realidad las grandes cosas, que surgen en el curso de una relación.

Actitud abierta

La actitud abierta, que consiste en detectar cuáles son las perspectivas de sus seguidores y en qué pueden convertirse, respetando al mismo tiempo, en todo su valor, lo que hoy son – al margen de lo que posean, controlen o hagan – y mostrando plena consideración por sus intenciones, deseos, valores y objetivos, en vez de concentrarse exclusivamente en sus comportamientos.

Confrontación compasiva

La confrontación compasiva, reconociendo el error, la equivocación y de la necesidad de que los seguidores “corrijan el rumbo”, en un contexto de auténtico tacto, preocupación y calidez hacia ellos, haciéndoles sentir que pueden arriesgarse a tomar iniciativas sin menoscabo de su seguridad.

Consistencia

La consistencia, es decir, que el estilo de liderazgo que uno adopta no es una técnica de manipulación que se pone en juego cuando las cosas no se hacen como uno quiere o se enfrenta a una crisis o un cuestionamiento, o está acorralado, sino que, por el contrario, se convierte en un marco de valores, en un código personal, en una manifestación del propio carácter, en un reflejo de quién es y en qué se está convirtiendo uno mismo.